mientras llovía alguien se caía y yo solo veía como mi sueño mas adelante se destruía. Distraida, empezaba a sentir como poco a poco la vida que veía se me iba, no entendía, que era lo que sucedía.
uno, dos, tres, cuatro y fueron cinco y mas pasos por dar que sentí que el sentido del ritmo no iba conmigo, que debía parar, todo me pasaba en cámara lenta, la luz era pareja no había contrastes, estuve a punto de sentarme y a su vez de expresarme...
mis planes estuvieron a punto de cambiarse, pasaron las horas se volvió de noche, en los minutos anteriores solo pensaba en el ¿por que? de no hacer cosas mejores.
y caí en relatos ya contados, repasados y aprobados ese no era el camino dado, este era tan lineal, que era irreal.
camine durante horas, buscando algo seguro durante un tiempo inseguro, donde no había dirección, las manecillas del reloj seguían su destino, el tiempo no paraba era algo que retumbaba en mi cabeza y me decía una y otra vez que ese lugar tal vez cambio de apariencia, o que tal vez la fecha de caducidad acabo con su existencia.
de regreso la decisión se hacia presa de la indecisión, caminaba nuevamente sin dirección, esta vez sin objetivo sin algo preciso, pienso que meditaba lo sucedido. y de pronto me topaba con algo repetido, nadie me hubiese creído de no haberlo vivido.
cerré los ojos. Antes vi las nubes partir, quise dormir era un sueño merecido, por el tiempo transcurrido y el deseo de poder haberlo obtenido.
mi alarma emite el sonido a cierta hora de la madrugada. abro los ojos no es la hora adecuada, mas sin embargo es la numeración deseada, permanezco despierta, pensando en lo correcto e incorrecto, tocando cada una de las posibilidades, y me convenzo a mi misma de que hoy, conseguiré lo que el día de ayer pude ver a través de aquel aparador y quise poseer.
el
d
e
s
t
i
n
o
puede
s
e
r
lo
que
deseamos
v
e
r
.
yo por mi parte solo deseaba ser y dejarme ver.
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